Rafael Batista
Abstracto
La acumulación de lípidos en los hepatocitos causa esteatosis hepática o enfermedad del hígado graso. Cuando la enfermedad se vuelve crónica, se desarrolla una inflamación lobulillar y puede derivar en fibrosis hepática, cirrosis hepática o cáncer hepatocelular. Se prefiere el diagnóstico temprano, ya que las personas a las que se les diagnostica en las primeras etapas de la enfermedad responden mejor al tratamiento. Las pruebas de laboratorio, las imágenes y la biopsia se pueden utilizar para diagnosticar y controlar la enfermedad del hígado graso y la fibrosis hepática. La ecografía es una de las modalidades de imagenología más eficaces para identificar y controlar a las personas con enfermedad hepática. Cuando hay endurecimiento, fibrosis o cirrosis del hígado, la elastografía por ecografía investiga el grado de deformación del órgano o la lesión.
Palabras claveUltrasonografía, técnicas de imagen de elasticidad, imágenes del hígado