Salud dental: investigación actual

Láser en odontología

Barbara Skrlj Golob

La cavidad oral es un entorno complejo, en el que los tejidos duros y blandos se encuentran en estrecha proximidad y todos ellos dentro de una saliva cargada de bacterias. Todos los tejidos orales son receptivos al tratamiento con láser. LASER es un acrónimo de Light Amplification by the Stimulated Emission of Radiation (Amplificación de luz por emisión estimulada de radiación). Según el uso clínico en odontología, conocemos los láseres de tejidos blandos, de tejidos duros y los llamados láseres para todos los tejidos. Otra clasificación se basa en la longitud de onda del láser en el espectro electromagnético de la luz: ultravioleta, visible, infrarrojo cercano, medio y lejano. Los componentes básicos del láser son: la cavidad óptica, el medio activo que caracteriza la longitud de onda del láser específico, la fuente de bombeo, el controlador, el sistema de suministro que transporta la energía del láser a una pieza de mano terminal y puntas y, finalmente, al tejido. La mayoría de las longitudes de onda láser utilizadas en odontología caen en el espectro visible e infrarrojo. El láser infrarrojo medio representa los láseres para todos los tejidos, para su aplicación tanto en la mucosa como en las encías, los dientes y los huesos. Los láseres de infrarrojos visibles, cercanos y lejanos se utilizan principalmente para su aplicación en tejidos blandos, algunos de ellos se utilizan para la detección de caries y la bioestimulación. La interacción de la luz láser con el tejido sigue las reglas de la física óptica. El haz láser puede reflejarse, absorberse, difundirse y transmitirse. La selectividad de la acción depende de la afinidad entre una longitud de onda y un tejido objetivo.

Aunque la mayoría de los láseres dentales son relativamente fáciles de usar, se deben tomar ciertas precauciones para garantizar su funcionamiento seguro y eficaz. La primera y más importante es el uso de gafas protectoras por parte de cualquier persona que se encuentre en las proximidades del láser mientras esté en uso. Esto incluye al médico, los asistentes de la silla, el paciente y cualquier observador, como familiares o amigos. Es fundamental que cada una de las gafas protectoras que se usen sea específica para la longitud de onda. Además, la exposición accidental al tejido no objetivo a menudo se evita mediante el uso de señales de advertencia colocadas fuera de la zona de peligro nominal, limitando el acceso al entorno quirúrgico, minimizando las superficies reflectantes y asegurando que el láser esté en buen estado de funcionamiento, con todas las medidas de seguridad del fabricante in situ. Con referencia a la prevención de la posible exposición a patógenos infecciosos, se debe utilizar una succión de alto volumen para evacuar cualquier columna de vapor creada durante la ablación de tejido, y se deben seguir los protocolos normales de infección. Cada oficina debe tener un Oficial de Seguridad Láser delegado para supervisar el uso correcto del láser, coordinar la capacitación del personal, supervisar el uso de gafas protectoras y estar familiarizado con las regulaciones pertinentes.

La cirugía conservadora de tejidos blandos con láser dental se tiene en cuenta dentro del alcance de la práctica aceptada y, por lo general, se considera un procedimiento cubierto por la mayoría de las pólizas de seguro profesionales diseñadas para especialistas dentales. El consentimiento debe ser de rutina y se maneja mejor como parte del formulario de consentimiento general que cada paciente lee y firma antes del inicio del tratamiento dental. Es muy recomendable que cada médico realice un curso de un proveedor de buena reputación.

La tecnología láser para la aplicación en tejidos duros y la cirugía de tejidos blandos se encuentra en un alto estado de perfeccionamiento, habiendo tenido varias décadas de desarrollo hasta el momento, y pueden producirse más mejoras. El sector de las reacciones fotoquímicas basadas en láser es muy prometedor para aplicaciones adicionales, en particular para dirigirse a células, patógenos o moléculas específicas. Se prevé que un área adicional de crecimiento futuro sea una combinación de técnicas láser diagnósticas y terapéuticas. De cara al largo plazo, se espera que las tecnologías láser específicas se conviertan en componentes esenciales de la práctica moderna durante la próxima década.