Cecilie Paulsrud, Hans C Hasselbalch y Ole Weis Bjerrum
Objetivos: El interferón alfa (IFN-α) se utiliza cada vez más en el tratamiento de las neoplasias mieloproliferativas crónicas (NMP) negativas para el gen Filadelfia. Sin embargo, alrededor del 20% de los pacientes interrumpen el tratamiento debido a los efectos secundarios, incluida la disfunción tiroidea.
Métodos: Este estudio retrospectivo informa sobre pacientes con NMP que desarrollaron enfermedad tiroidea autoinmune (EITD) durante el tratamiento con IFN-α, lo que representa el 5,0% de la cohorte (n = 160).
Resultados: Ocho pacientes (siete mujeres) desarrollaron EITD con anticuerpos de peroxidasa tiroidea positivos. Siete pacientes tenían policitemia vera (PV) y una trombocitemia esencial (TE). Los pacientes eran más jóvenes que el promedio y desarrollaron EITD entre 5 y 86 meses después del inicio del IFN-α, seis dentro de los 15 meses. En dos pacientes, la hormona estimulante de la tiroides se normalizó después de disminuir la dosis de IFN-α y suspender el tratamiento, respectivamente.
Conclusión: Este informe destaca la importancia de controlar la función tiroidea antes y durante el tratamiento, ya que los efectos secundarios del IFN-α pueden imitar la enfermedad tiroidea. Aunque se debe considerar la interrupción del tratamiento con IFN-α, es posible continuar el tratamiento.