Lorenzo Santini*
El consenso general sobre la necesidad de descarbonizar los métodos de producción de energía empleados actualmente está reavivando inevitablemente en muchos países el debate sobre la energía nuclear. El debate sigue estando repleto de opiniones en contra de esta tecnología sobre la base de sus supuestos riesgos, costes y orígenes controvertidos. En el presente artículo, tras una breve reseña de los orígenes de la tecnología nuclear, intentamos revisar dichas afirmaciones mostrando que la mayoría de ellas carecen de fundamento y se basan en suposiciones injustificadas.