Liz Juárez y Susan Chaney*
Informamos del caso de una mujer afroamericana de 37 años sin seguro que acudió al consultorio quejándose de una masa mamaria durante aproximadamente un mes. La paciente fue examinada durante la visita inicial al consultorio y se le solicitaron imágenes adecuadas según las pautas actuales para este tipo de queja. La literatura muestra que aproximadamente el 42 por ciento de las pacientes que acuden a los proveedores de atención primaria con síntomas mamarios informan una masa mamaria. Si bien la mayoría de las masas son benignas, son el síntoma de presentación más común en pacientes con diagnóstico de cáncer de mama. Una masa palpable en el pecho de una mujer requiere una evaluación rápida. El diagnóstico correcto de una masa mamaria es esencial para la planificación óptima del tratamiento, siendo el objetivo principal confirmar o excluir el cáncer. El cáncer de mama es el cáncer más común entre las mujeres de todas las razas y es la principal causa de muerte por cáncer entre las mujeres hispanas y la segunda entre las mujeres blancas, negras, asiáticas/isleñas del Pacífico e indias americanas/nativas de Alaska. La prueba triple (TT) aconseja la evaluación de masas mamarias palpables mediante examen físico, mamografía y aspiración con aguja fina (PAAF), y ha demostrado ser una herramienta confiable y precisa debido a su simplicidad técnica y menor costo y morbilidad en comparación con la biopsia quirúrgica abierta. Las mujeres afroamericanas de bajos ingresos a menudo informan que reciben menos información sobre riesgos médicos y, debido a la falta de seguro, no tienen una fuente regular de atención, lo que a su vez conduce a una menor utilización de los servicios de salud médicos. Este caso resalta la importancia de la utilización de la prueba triple al evaluar mujeres jóvenes que se quejan de masas mamarias, pero también enfatiza el papel importante que desempeñan los proveedores cuando trabajan con poblaciones desatendidas.