Usha Sagadevan y Jayanthi Ponnusamy
La presencia de orina de color intenso es un indicador de una anomalía sistémica, la mayoría de ellas genitourinaria. Las otras causas podrían indicar anomalías hepáticas, lo que da lugar a una disfunción de la coagulación. Sin embargo, es poco frecuente encontrar un caso posparto de orina de color intenso en ausencia de cualquier patología local o sistémica. Este estudio informa de un caso raro de orina de color naranja en una mujer de 25 años el primer día de una cesárea del segmento inferior. La primigenia informó de un historial de infecciones recurrentes del tracto urinario y se le diagnosticó hipertensión inducida por el embarazo durante su período prenatal. Tras el ingreso a las 36 semanas, dio a luz mediante cesárea de segmento inferior un bebé con un peso normal de 2,2 kg y un buen APGAR. El primer día posoperatorio informó de una coloración naranja de su orina. Los análisis de sangre de rutina revelaron perfiles renales, hepáticos y de coagulación normales. Un análisis y un cultivo de orina revelaron la presencia de una infección urinaria con Klebsiella pneumoniae. Con el tratamiento con antibióticos sensibles, la coloración desapareció y la orina estaba libre de bacterias. Se ha propuesto que el mecanismo de la coloración intensa de la orina se debe a la presencia de indirrubina, como resultado de la descomposición del triptófano por parte de las bacterias en un entorno alcalino. Este informe de caso ilustra la necesidad de una vigilancia constante para un diagnóstico temprano con el fin de prevenir complicaciones.