Zeine El Abasse*, Zahidi Hatim Amine, Yassine Tagmouti, Leila Azzouzi y Rachida Habbal
Antecedentes: La miocardiopatía periparto (PPCM) es una enfermedad rara, no reconocida y potencialmente mortal asociada al embarazo. Se define como una disfunción ventricular izquierda que ocurre en el último mes de embarazo o los primeros 5 meses posparto en ausencia de etiología conocida o enfermedad cardíaca preexistente. Estudios recientes sugieren una incidencia de 1 caso por cada 300 nacidos vivos en Haití en comparación con 1 caso por cada 3000 a 4000 nacidos vivos en los EE. UU. Las razones de esta variación entre países siguen siendo desconocidas, pero los datos sobre la incidencia de PPCM son aún escasos debido a los pocos registros poblacionales. Según Sliwa et al., la edad, la multiparidad y la toxemia o la hipertensión gestacional se han sugerido como los principales factores de riesgo de PPCM. Hemos realizado un estudio retrospectivo de cuatro años para determinar la prevalencia, las características clínicas y ecocardiográficas y los factores de riesgo de la miocardiopatía de Meadows en el hospital universitario de Casablanca. Resultados: Se incluyó un total de 37 pacientes en este estudio, todos los pacientes fueron seguidos durante al menos 12 meses después del diagnóstico. La edad media de nuestras pacientes fue de 29 ± 5 años. El diagnóstico se estableció anteparto en 24%, posparto en 48% y 26% al inicio del trabajo de parto. La edad media del embarazo al momento del diagnóstico fue de 34 ± 6 semanas de amenorrea. Se encontraron antecedentes de hipertensión durante el embarazo y diabetes respectivamente en 3 pacientes, y se informó dislipidemia en 6 pacientes. 8 pacientes tenían preeclampsia coexistente. La paridad media fue de 2,2 ± 1,8 y la media de gravidez fue de 2,4 ± 1,6. La disnea y los síntomas de insuficiencia cardíaca izquierda fueron los signos más frecuentes de miocardiopatía precoz observados en nuestras pacientes con respectivamente 92% y 41% para cada uno. 3 pacientes murieron durante la hospitalización con una tasa de mortalidad de 11,5%, las dos causas de muerte fueron shock cardiogénico (2 pacientes) y una muerte súbita probablemente debido a arritmias ventriculares. Se realizó regresión logística multivariada para identificar predictores independientes de mortalidad en nuestro estudio. Comparando los sobrevivientes con las muertes, la preeclampsia, la baja FEVI inicial y la insuficiencia mitral grave en el momento del diagnóstico fueron predictores significativos asociados con la mortalidad, como se muestra en la Tabla 3. Conclusión: La miocardiopatía precoz es una enfermedad cardíaca rara y potencialmente mortal con una tasa significativa de morbilidad y mortalidad materna. El diagnóstico temprano basado en la ecocardiografía transtorácica es esencial y se debe iniciar rápidamente el tratamiento médico adecuado. Se debe considerar la prevención de arritmias letales en todos los pacientes con miocardiopatía precoz con FEVI reducida para evitar muertes cardíacas súbitas, que son una de las principales causas de muerte en nuestro estudio.