La genética animal es una rama de la medicina veterinaria que estudia la herencia y la variación en los animales. Se basa en principios y conceptos genéticos generales y utiliza principalmente los métodos híbrido, citológico, poblacional, ontogenético, matemático-estadístico y gemelo de la genética general. Los animales tienen una herencia de caracteres principalmente independiente porque tienen una gran cantidad de cromosomas. El principal método para estudiar la herencia de caracteres es el análisis híbrido; esto ayuda a determinar la naturaleza de la herencia de muchos rasgos morfológicos, fisiológicos y bioquímicos, que frecuentemente dependen sólo de uno de varios pares de genes. Continúan las investigaciones sobre la correlación entre estos genes, por un lado, y la productividad, fertilidad y viabilidad de los animales, por el otro. Se presta mucha atención a las propiedades bioquímicas de la leche y la sangre animales, en particular a la inmunogenética, cuyos resultados se utilizan para comprobar el pedigrí de los animales de raza pura, determinar su origen exacto en casos controvertidos, etc. Mediante el estudio de los genes responsables de las propiedades bioquímicas, es posible analizar la estructura de las razas, sus líneas y especies, y juzgar el grado de su uniformidad. Los defectos morfológicos y el subdesarrollo de los órganos individuales de los animales se han explicado en términos genéticos. Se sabe que muchos defectos del desarrollo (como la apariencia de un bulldog, el enanismo y la hidropesía en terneros, conejos y otros animales) están determinados por los llamados genes letales y semiletales. Los individuos que portan estos genes mueren o tienen baja viabilidad.