Los requisitos principales y esenciales para el cultivo de una planta sana son la temperatura óptima, el pH, la luz, el agua, el oxígeno, los nutrientes minerales y el soporte del suelo. Una planta sana es un requisito previo para un medio ambiente libre de contaminación y para mantener la salud humana y animal. El uso de productos vegetales cultivados orgánicamente puede superar los efectos nocivos de los pesticidas e insecticidas dañinos.