Los huesos son rígidos, pero se doblan o ceden un poco cuando se aplica una fuerza externa. Sin embargo, si la fuerza es demasiado grande, los huesos se romperán, del mismo modo que una regla de plástico se rompe cuando se dobla demasiado. La gravedad de una fractura suele depender de la fuerza que provocó la rotura. Si el punto de rotura del hueso se ha superado sólo ligeramente, entonces el hueso puede agrietarse en lugar de romperse por completo. Si la fuerza es extrema, como en un accidente automovilístico o un disparo, el hueso puede Si el hueso se rompe de tal manera que fragmentos de hueso sobresalen a través de la piel, o una herida penetra hasta el hueso roto, la fractura se llama una fractura abierta. Este tipo de fractura es particularmente grave porque una vez que se rompe la piel, puede ocurrir una infección tanto en la herida como en el hueso. Los tipos comunes de fracturas incluyen: Fractura estable. Los extremos rotos del hueso se alinean y apenas están fuera de lugar. Fractura abierta y compuesta. La piel puede ser perforada por el hueso o por un golpe que rompa la piel en el momento de la fractura. El hueso puede ser visible o no en la herida. Fractura transversal. Este tipo de fractura tiene una línea de fractura horizontal. Fractura oblicua. Este tipo de fractura tiene un patrón en ángulo. Fractura conminuta. En este tipo de fractura, el hueso se rompe en tres o más pedazos.