Ahmed Refat Ragab Ali
Diez errores iatrogénicos críticos reales en la práctica de la toxicología clínica
Introducción: La toxicología clínica es uno de los nuevos campos de rápido avance en la sala de emergencias. Uno de los puntos más característicos en este campo es la marcada variación en la teoría del manejo. Objetivo: El propósito de la investigación existente fue rastrear a los pacientes con el error iatrogénico más peligroso en emergencias toxicológicas graves. Material y métodos: Informamos sobre 10 pacientes con intoxicaciones agudas por sustancias tóxicas variables con un claro error iatrogénico a través del procedimiento de notas clínicas. Resultados: El primer caso informado fue el de una intoxicación peligrosa que fue causada por la ingestión de cáusticos con una megadosis prescrita de metil-predinisolona 30 mg / kg. El siguiente caso fue el de una intoxicación grave por atropina notificada en un niño de 4 años de edad que supuestamente sufría un episodio de intoxicación alimentaria que se diagnosticó incorrectamente como una intoxicación grave por organofosforados. El tercer caso comprendió siete casos de intoxicación grave por organofosforados que fueron llevados de urgencia a la sala de emergencias debido a una toxicidad mixta por atropina que se debió a la aceleración del procedimiento de atropinización completa sin controlar la dosis / horario. El cuarto caso fue un caso típico de intoxicación alimentaria masiva accidental en cinco miembros de la familia que se identificó simultáneamente como un caso puro de toxicidad accidental debido a una fuga de gas de monóxido de carbono de su sistema de biogás doméstico. El quinto caso fue una elección incierta de realizar hemodiálisis en cinco casos diferentes de personas que informaron un consumo peligroso de metanol. El sexto caso iatrogénico fue un diagnóstico erróneo en la concentración del etanol (10% o 100%) administrado por vía oral. El séptimo caso fue el de una granjera de 51 años que no fue observada cuidadosamente y fue dada de alta prematuramente en un caso de sospecha de mordedura de serpiente después de 4 horas. El octavo caso fue un estricto seguimiento de la dosis prevista mencionada en el vial del antiveneno "Una ampolla administrada por vía intramuscular". El noveno caso fue el de una paciente suicida de 37 años que tuvo una inducción iatrogénica del vómito debido al consumo de tabletas de fosfuro de zinc. El último caso fue de síndrome neuroléptico maligno en el que se prescribió medicación para modificar la alteración de los neurotransmisores que se debía a los medicamentos antipsicóticos. Conclusión: El presente estudio aclara que es fundamental seguir estrictamente la línea de tratamiento cuando se trata la exposición tóxica aguda.